Creo que todos buscamos evitar las dificultades y mientras de nosotros dependa, no meternos en problemas.
¿Cuál es la mejor manera de evitar problemas innecesarios? La respuesta la encontramos en las sabias palabras del Rey Salomón:
“El prudente ve el mal y se esconde, pero los ingenuos pasan y reciben el daño”. Proverbios 22:3 (RV 1995)
La version Reina-Valera de 1960 dice que “el avisado” ve el mal y se esconde, y otra versión dice “El que es inteligente ve el peligro y lo evita, el que es tonto sigue adelante y sufre las consecuencias”. (BLS)
El avisado y el prudente es el informado, el que ha recopilado conocimiento que puede utilizar para tomar decisiones. Por eso “El ingenuo todo lo cree; pero el prudente mide bien sus pasos”. Proverbios 14.15 (RV 95).
Es por eso que muchas personas aprenden “por las malas”, en cambio hay gente que observa y aprende de otros: “El tonto sólo aprende a través del castigo; al que es sabio le basta con sólo ser reprendido”. Proverbios 19:25 (RV 95)
En este día yo no tengo nada que decirte, pero la Palabra de Dios a través de la sabiduría de Salomón dice lo siguiente:
“El sabio conoce el miedo y se cuida del peligro, pero el tonto es atrevido y se pasa de confiado. El que pronto se enoja pronto hace tonterías, pero el que piensa en lo hace muestra gran paciencia. La recompensa de los tontos es su propia estupidez; el premio de los sabios consiste en saber cómo actuar”. Proverbios 14. 16-19 (BLS).