El Regalo Divino Para Guiar Tu Vida

Me gustaría compartirte acerca de uno de los mejores regalos que Dios nos ha dejado además de Su hijo Jesús: Su Palabra. El salmo 61:2 (RVR60) dice: “Cuando mi corazón desmayare, llévame a la roca que es más alta que yo”

¿Sabes quién esa gran piedra donde puedes quedar a salvo del peligro? Se llama Jesucristo.

Pero, ¿Cómo es que Dios nos puede llevar a esa roca que nos brinda seguridad y protección? Lo hace a través de Su Palabra: Son sus dichos los que nos anima, nos dan vida, nos guían y nos acercan más a Jesús.

Mira lo que decía el salmista:

“Me siento totalmente desanimado; ¡infúndeme vida, conforme a tu palabra! Salmos 119.25 (RVC)

En los momentos de ansiedad y total desesperanza, la Palabra de Dios nos infunde ánimo y sopla vida a todo nuestro ser:

“La ansiedad me corroe el alma; ¡susténtame con tu palabra! Salmos 119.28 (RVC)

En los momentos más duros de nuestra vida, hay una fortaleza sobrenatural que podemos recibir de la Palabra de Dios:

“En mi aflicción, ellas son mi consuelo; pues tu palabra me infunde nueva vida.” Salmo 119:50 (RVC)

Leer la Palabra de Dios cada día es muy importante, pues nos recuerda que Él es bueno y cuida de nosotros. Su Palabra nos dice que no estamos solos y que Él está en control, así como también nos instruye para llevar una vida justa:

“Toda la Escritura es inspirada por Dios y es útil para enseñarnos lo que es verdad y para hacernos ver lo que está mal en nuestra vida. Nos corrige cuando estamos equivocados y nos enseña a hacer lo correcto.” 1 Timoteo 3:16 NTV

Por eso Pablo nos instruye para que siempre “habite en ustedes la palabra de Cristo con toda su riqueza”. Colosenses 3.16 (NVI). El salmista decía: “Me alegro en tu palabra como alguien que descubre un gran tesoro”. Salmos 119.162 (RVC)

Hoy permite que la Palabra de Dios habite en abundancia dentro de ti, esto te llevará a la roca que es Jesús, para conocerle más, estar confiado en tiempos de angustia y seguirle fielmente.

“Pues la palabra de Dios es viva y poderosa. Es más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra entre el alma y el espíritu, entre la articulación y la médula del hueso. Deja al descubierto nuestros pensamientos y deseos más íntimos.” Hebreos 4:12 NTV

¡Que la riqueza de la Palabra de Cristo sea una fuente constante de fortaleza y guía en tu vida!

Comentarios de Facebook

Respuestas

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *